Estáis ante un pequeño rincón que trata de ser literario, aunque a día de hoy sea difícil trazar la línea entre la basura y la literatura, es vuestro el deber de juzgar

jueves, 31 de marzo de 2011

Cosmos

Casi puede respirar su esencia, es una parte del aire, exhalando magnetismo por cada uno de sus poros, esos ojos oscuros que le miran como si se tratase del único. La melena que se mece con el movimiento de su dueña, un guiño más, y el olor de su colonia, el olor de su piel.

Cada vez que la mira es más suya, y con la confianza que da la desnudez, le acaricia el abdomen, es un tacto lúcido, un tacto también luminoso. Se mueve encima de él, la luz y las brasas de la chimenea al fondo de la habitación, la ropa tirada quién sabe cómo y dónde, pero lo único importante es que son uno, y ella es aparte.

No piensa en sus formas, no piensa en las aureolas que roza con un espasmo de placer, solo piensa en su mirada, en cada momento fija en él, en cada momento que pasa un poco más perdida en el infinito del puro goce.

Las estrellas se abren entre el crepitar de la chimenea, de los ojos de ELLA comienza a salir luz, iris y pupilas perdidos, los ojos en blanco y un cosmos alternativo que nace de su rostro, de su cuerpo desnudo, un mundo diferente, en el que lo terrenal no importa, y el deja de estar tumbado, se sienta y la abraza sin salir.

Están unidos en el Universo, y ni siquiera sabe su nombre, qué superficial estupidez, ahora es cuando le gustaría no haber contratado los servicios de esa mujer tan atractiva.

1 comentario:

  1. Y que es el nombre sino una convención de sonidos? Al final, lo único que nos queda es lo que hemos vivido...
    Seguiré buscando personas sin ese ego. No quedan muchos de esa especie, pero también los que escribimos sin necesidad de que nadie nos lea somos una especie en peligro de extinción, pero que subsiste ;)

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